martes, 9 de junio de 2009

Una pequeña presentación

Somos cuatro chicas de la Universidad Complutense de Madrid, estudiantes de Publicidad y R.R.P.P.
En esta página podrás realizar un viaje por el mundo de la moda desde los inicios del Siglo XX hasta la actualidad
Desde Worth a Chanel
Pasando por Dior e Yves Saint Laurent
Y sin olvidar a Marc Jacobs, John Galliano, Zara, H&M y Topshop.

"La moda no existe sólo en los vestidos. La moda está en el cielo, en la calle, la moda tiene que ver con ideas, la forma en que vivimos, lo que está sucediendo" dijo Coco.
El mundo es estilo, es moda, y está de moda.
Y es que la moda está en todas partes.

Karolina Rosa, Eva Pulido, Mariola Ruiz y Alejandra Sánchez.

Introducción al tema de la moda:



Antes de comenzar a hablar sobre moda tenemos que conocer el significado que el concepto “moda” conlleva.

Según el Diccionario de la Real Academia Española, la moda es una costumbre que está en boga durante algún tiempo, o en determinado país, con especialidad en los trajes, telas y adornos. Enriéndese principalmente de los recién introducidos.


Otra definición más clásica y corriente dice que es una costumbre iniciada por una minoría prestigiada e importante, que llega a la sociedad y es aceptada por ella.

Existe, sin embargo, otra definición de corte mucho más periodístico según la cual la moda es un fenómeno social colectivo que retrata a un pueblo. Surge de la vida misma como medio de expresión y comunicación.

Para la periodista Margarita Rivière, la moda es como la narrativa difusa que ha movilizado masivamente la gente de esta época a ver, comprar y convertir esa narración en parte de uno mismo.

Los sociólogos más serios aseguran que todos tenemos varias identidades, de lo cual hay que congratularse puesto que es síntoma inequívoco de que llevamos la pluralidad dentro de nosotros mismos. La moda en la indumentaria ha puesto todo esto a nuestro alcance y lo ha convertido casi en obligación. La moda es ese mecanismo sutil que hace aflorar a la vez lo conocido y lo desconocido de cada individuo.


La moda ha regido relaciones personales y colectivas, ha levantado mitos, ha creado historias, ha movilizado voluntades y ha construido paraísos imposibles.

Pero el concepto de moda que más se adecua a nuestro objetivo es el siguiente: Moda son los gustos pasajeros que condicionan costumbres y tendencias en cualquier aspecto de la vida, aquello que tiene la atención general centrada en sí, que ha creado un momentum a su alrededor.

El fenómeno moda lleva implícito unas condiciones básicas: su sentido de la fugacidad, su interés radical por el cambio espectacular, por las variaciones que desembocan en su amor incondicional por todo lo que signifique novedad. Todo lo que es moda, pasa de moda, y esa facilidad para no permanecer es lo que define el auténtico proceso de la moda.

Lo mejor es siempre el presente, por eso la moda (sobretodo la que a indumentaria se refiere), entendida como un proceso de creatividad, tiene como principal cualidad estar en el momento.

Este amor apasionado por el presente hace que lo que está en la calle, lo que se lleva en cada momento nos entre por los ojos y nos parezca lo más favorecedor, lo más bonito. En cada época se cree firmemente que la moda del momento es la expresión definitiva, la más razonable, la más estética.

Pero la exaltación incondicional del presente supone en cierta manera una descalificación del pasado, de aquello que fue y ya no es novedad. Por eso la aparición de la moda como tal (otra vez nos referimos casi exclusivamente a la moda de vestimenta), surge cuando la sociedad deja de concentrarse en la tradición y el pasado colectivo, y otorga una aureola de prestigio a las nuevas formas y costumbres.

Ahora comenzaré a hablar sobre la historia de la moda…

La moda fue un invento magníficamente interesante que conformó la modernidad humana. Existe desde el siglo XIV. Apareció espontáneamente como instrumento aristocrático de diferenciación grupal, afirmación de la individualidad y embellecimiento personal. Su nacimiento significó un avance en la sensibilidad occidental.

Por todo ello, su inicial y principal función a lo largo de estos cinco siglos de vida se ha ejercido en el ámbito de la indumentaria. La moda fue la encarnación de la mediación entre una idea y su realización, para lo cual desarrolló toda la fuerza emocional de los iconos y los símbolos.

Su extraordinario desarrollo se debió a la importancia que para el hombre moderno ha tenido progresivamente la apariencia, símbolo sobre el dominio sobre las condiciones de vida. La degeneración de esa lógica deducción por las formas de las imágenes en el delirio y obsesión por el exceso de signos, el espectáculo gratuito y la virtualidad como sustituta real del mundo tangible, cierra una historia singular. Y abre también nuevas incógnitas.

Los expertos señalan tres etapas básicas en la historia de lo que se ha llamado moda aplicada a la indumentaria:


La larga etapa aristocrática, entre los siglos XIV y XIX, su utilidad común es como instrumento social para distinguir la calidad de las personas. Como claro instrumento de poder, las nuevas clases burguesas pugnaban por apoderarse del control de ese instrumento definitorio de identidades en las incipientes ciudades de la edad moderna, a las que la moda ayuda a transformarse en el paraíso del ver y ser visto y en el escenario donde exhibir la ilimitada ambición humana de señorear la tierra.

La etapa burguesa va desde principios del siglo XIX hasta los años 20 del siglo XX. Se amplía la base social de la moda y crea un nuevo instrumento de diferenciación para esas elites: La Alta Costura, que, a su vez, se convierte en el faro que ilumina la apariencia del mundo divulgando ampliamente los valores burgueses, entre los cuales sobresale el mandato de ser lo que se aparenta y no al revés. La moda consolida su poder de persuasión, su capacidad mediadora entre idea, imagen y realidad, su atractivo como resorte psicológico de creación de deseos. Gracias a este intermediario sutil que es la moda, madre directa de la imagen cinematográfica, se difunden modelos de vida, de emociones, y de comportamientos en el mundo entero.

La etapa consumista se inició en los Estados Unidos durante los años veinte de nuestro siglo. En este tiempo no seguir la moda equivale a la exclusión social. La moda en la indumentaria permite a una mayoría de individuos de las sociedades occidentales sentirse como los aristócratas del Renacimiento y los burgueses de la industrialización.

El carácter regresivo de la moda en esta etapa queda siempre oculto tras el carácter dinámico permanente y la intención aparentemente innovadora de sus sucesivos mensajes estéticos y sociales. El dinamismo y la apropiación de la innovación han garantizado su gran éxito entre la juventud, a la que ofreció un protagonismo durante los felices años 20 y, en especial, desde la década de los 60.

Los jóvenes hacen suya la moda hasta el punto de que no conciben una vida sin moda: sin esa orientación decisiva en la vida de cada uno de ellos. La moda ahorra el pensamiento, la elección y finalmente aniquila la incómoda responsabilidad. El enorme éxito, popular y mercantil, de su sistema de imposición de modelos y conductas en el terreno de la indumentaria y las costumbres, la introdujo como algo imprescindible en la emergente industria de los medios de comunicación, la economía y la divulgación de modelos políticos y de convivencia.




La actualidad, la noticia, la fama, la notoriedad y la posibilidad de negocio han acabado siendo sinónimos de moda. El sistema de la moda y su lenguaje definen toda la cultura de la imagen simbolizada por el cine, las noticias y el espectáculo en general. Lo que está de moda es, pues, noticia y adquiere así el derecho a ser divulgado por los medios de comunicación más influyentes del globo, que son los que se sitúan al servicio de la moda, convertida en una motivación obligatoria de su conducta. El siglo veinte es, sin duda, el siglo de la moda, ese instrumento capaz de anticiparse a los deseos de las personas.

Mariola Ruiz Martínez

lunes, 8 de junio de 2009

La moda desde 1900 hasta 1950

Como ya hemos nombrado anteriormente, es con Charles Worth cuando se inicia la moda, o al menos la moda tal y como la conocemos hoy en día. Sin embargo, esta moda se fundamenta en la aparición del concepto de la higiene, a finales del siglo XIX. Es en este siglo, en este momento, cuando cae el poderoso Ancien Régime, cuando la Burguesía se hace con el poder, cuando se destrona a la Aristocracia, cuando se inicia el vestido, cuando comienza la Belle Époque. Esta distinguida época se caracterizó por su rescate de la singularidad, del estilo aristocrático, su distinción y diferenciación, que habían sido anulados por el academicismo burgués. Esta nueva singularidad viene de la mano de influencias artísticas tales como la música, la pintura, y el arte, las cuales, combinadas, dieron un resultado asombroso. ¿Liberación? Tal vez podríamos así llamarla. Belleza despojada de acorsetamiento, estilo suelto, colorido, sensual...la moda de las cocottes.

La Belle Époque



Pero no nos olvidemos de Worth. Worth consideró la moda como "el espacio vacío de la continuidad del cambio a partir de un objeto que se degrada antes de que se desgaste". Nada ha cambiado hoy en día. Esta moda worthiana, aristocrática y de corte, muy distinta de la estadounidense, se vio inmersa en la modernidad a la muerte de la Reina Victoria de Inglaterra, con la consiguiente desaparición de la moda victoriana. En esta moda francesa surge un nuevo artista, Poiret, quien encontró su inspiración en el Art Noveaux. No podemos iniciarnos en la moda sin nombrar a quien es considerado el maestro de Chanel, su precesor por excelencia, quien llevó a cabo una de las revoluciones de la moda más importantes. Aparecen nuevos cortes, nuevos estilos, colores chillones y sombreros ostentosos. Es Poiret el responsable de la caída de la corsetería femenina, un distinguido símbolo burgués.

Aquí encontramos un video sobre Poiret, y una representación de la Belle Époque.

La moda, como concepto social, se ve ligada y afectada por cualquier cambio en la sociedad. Y eso mismo ocurrió a principios de siglo. "Algunas veces las princesas andan en autobús o a pie por las calles". Aparece el automóvil. La moda pasa a la calle.

Por el contrario, la moda rusa mostró una rígida oposición ante la influencia de la Modernidad. Era una moda también aristocrática, ostentosa, poderosa. Era una moda antimoderna. En el primer atisbo de libertad, ésta dio paso a la modernidad, surgiendo la moda constructivista soviética. "Comodidad, belleza, elegancia". Tan solo tres palabras.

Grace Kelly en la Ventana Indiscreta,
ejemplo de la Moda Constructivista Soviética.


Los felices años 20 también fueron felices para la moda. La moda de las abreviaturas: el cambio abreviado, la falda abreviada. Una moda tubista, un estilo tubista, "las mujeres tubo" de Léger.
Pero los años 20 tienen otro nombre: Chanel.
"La moda se pasa de moda, el estilo jamás". Creadora del estilo "chic pobre", la irregular, solitaria y singular Coco inventaba un estilo mientras sus colegas de profesión pensaban únicamente en estrenar modas. Una mujer bien vestida sería, a partir de entonces, una mujer poco vestida. Exigirá gustarse a sí misma en primer lugar, antes de intentar complacer al espectador. Coco dio lugar a la mujer,y al igualarse a los hombres, acabó por ser superior a ellos.
Este nuevo estilo, nuevo género de comportamiento, no era ni masculino ni femenino: era el suyo.


Gabrielle Chanel



El vestido atiende en cada momento histórico a las situaciones políticas. No lo pongo en duda. Conocemos la moda de los años 30 como una moda carnavalesca, como símbolo de reivindicación ante la política totalitarista. Pura ironía. Aquella exageración de sombreros y maquillaje, muchísimo maquillaje, que simulaba ese amor incondicional por aquellos mandatarios.
Un dato más bien curioso, no sin menor relevancia: el bordado de las estrellas de David sobre la ropa de los judíos gue el factor impulsor de la moda, estadounidense, de imprimir rostros, dibujos o inscripciones sobre las t-shirts.

En los años 40 la moda vuelve a plasmar aquella terrible situación política. Situémonos en la Francia ocupada. La moda se reivindica, la moda parisina deja de existir. No podemos hablar de moda.
A su vez, también remarca el fin de esa guerra, quería hacerlo, se reinicia a sí misma. En 1945 aparece el "New Look" de Christian Dior, la reutilización de la moda. Vuelve la elegancia dieciochesca, los colores vivos, el exceso de telas. Vuelve la moda francesa, y vuelve a lo grande.

Llegamos a la mitad de siglo, al momento más ardiente de la lucha entre Estados Unidos y Francia por la hegemonía de la moda. Por un lado, el "ready-to-wear" estadounidense, el think-pink y el consumismo; por otro lado, el "hiperrefinamiento de los 50" europeo. Dior y Givenchy mantenían un secretismo absoluto respecto a sus diseños, mientras que Chanel festejaba que la copiaran. "Nadie lo hará como yo".
Surge el término modernistas, considerados como los mejores diseñadores del siglo XX. Watteau (Dior), Fragonard (Givenchy) y el Picasso de la moda (Balenciaga) estarían en boca de todos.
La repentina muerte de Christian Dior en 1957 desorientó a la moda de los 50, y dejó un mal sabor de boca en esta moda de la primera mitad del siglo XX.

Ready-to-wear.1950






Audrey Hepburn luciendo
un modelo de Givenchy


Eva María Pulido Maroto

La moda desde 1950 hasta finales de siglo

Tras la confusión causada por las consecuencias de la II Guerra Mundial en los años 50, la sociedad entró en una era de consumo de masas en los 70. La producción masiva se pudo ver en todos los sectores de la moda. Esto supuso el fin de la alta costura y la aparición de una indumentaria a precios razonables y de buena calidad que se llamó prêt-à-porter.

La época que tuvo como epicentro de la moda la alta costura termina. Las antiguas casas de alta costura dejan de vestir a las mujeres a la última. Estos desfiles que siguen existiendo tienen como finalidad perpetuar una finalidad al lujo y promover una política de marca. Sirven de escaparates publicitarios y como galerías de arte.
Los diseñadores de alta costura más importantes de la década de los 50 fueron Dior, Balenciaga y Chanel.
Cristóbal Balenciaga y Christian Dior

En los años 50 se impusieron los tacones de aguja, y los sujetadores de realce acabados en punta, junto a con las fajas y corsés, contribuían a acentuar un busto generoso y una cintura afiliada, crear una forma de guitarra que algunas mujeres como Marilyn Monroe ya poseían de forma natural.
En los años 60 las revueltas juveniles proliferaron. Se podía oír la voz de la juventud en grupos ingleses como The Beatles. La moda también se propuso expresar nuevas y atrevidas emociones. Los jóvenes creyeron que mostrar su físico era la manera más efectiva de diferenciarse de las generaciones anteriores.

André Courrèges creó la minifalda y Mari Quant llevó la “mini” al mundo de la moda que recibió la aceptación como el estilo normal del siglo XX. Y antes de que se hubiera calmado la conmoción causada por la minifalda, el pantalón llegó a la moda femenina. Los vestidos también causaron sensación. En su “Colección de la era espacial” Pierre Cardin presentó diseños de vestidos futuristas de sencillas formas geométricas. Yves Saint Laurent, abanderado entre los jóvenes diseñadores, también fue extremadamente sensible a las tendencias sociales. Creó una línea de pantalones sastre como moda urbana femenina y fue el primero en unir el arte y la moda con dos de sus modelos más importantes el “Mondrian look” y el “Pop Art look”. En el mundo de la alta costura Paco Rabanne debutó con un vestido confeccionado básicamente con plástico, que alejó sistemáticamente la idea de que sólo se podía utilizar tela para confeccionar vestidos.



Diseño Courrèges. Diseño Yves Saint Laurent. Diseño Paco Rabbanne

En los años 70 tuvo su mayor apogeo la moda hippie y folk. Los vaqueros se convirtieron en símbolo de la prosperidad americana, de las estrellas de Hollywood y la juventud rebelde. Además del espíritu naturalista hippie, las modas callejeras añadieron elementos esenciales en la imagen de finales del siglo XX: los mods, los punks, los rockers, surfistas, patinadores urbanos... y un vestuario funk y disco urbano.




En los 80 la moda regresó a su imagen conservadora. Las mujeres activas en el mundo de los negocios profesionales e interesadas en mantener sus cuerpos físicamente a punto, vestían con un estilo llamado Power dressing (“vestuario con poder”), que presentaba una imagen de clara autoridad y una feminidad con un pequeño toque sensual. Azzedine Alaïa lideró este estilo de los 80. Las casas parisinas tradicionales como Chanel y Hermès volvieron a ganar una posición privilegiada en el mundo de la moda. París era la capital de la moda, pero ahora otras ciudades entraron en ese círculo. Milán fue el centro de la moda italiana, los diseñadores más importantes destacaron en el momento fueron Giorgio Armani y Gianni Versace.



Naomi Campbell y Azedine Alaïa


En los años 90, se dieron cambios radicales en los sistemas sociales. El mundo de la moda también fue evolucionando, hasta convertirse en una industria gigantesca. El apasionamiento por las marcas hizo que las personas reconocieran que la moda era algo más que meros objetos, que ofrece una identidad y una personalidad sobre la persona que la lleva. La moda comenzó a considerar el cuerpo humano como objeto a “llevar”. Las antiguas artes de decoración corporal, como el maquillaje, tatuaje y piercing, reaparecieron como la última tendencia de moda, tanto masculina como femenina, a finales del siglo XX.

La segundo mitad del Siglo XX fue la época de las “supermodelos” y su papel era ejemplo, e incluso inspiración, de la moda de cada época. Entre ellas destacan: Twiggy, Cindy Crawford, Christy Turlinghton, Naomi Campbell, Linda Evangelista y Claudia Schiffer.


A finales del Siglo XX era posible encargar y enviar ropa de moda a cualquier parte del mundo. La moda actual se dirige a una uniformidad universal.
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Y si te encantan los vestidos de los 60s, la moda hippie, el estilo único de Audrey Hepburn o el cuerpo de guitarra de Marilyn Monroe, aquí te propongo algunas tiendas online donde podrás encontrar ropa de esa época adaptada a la actualidad:

http://www.adorevintage.com/
http://www.anthropologie.com/
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Alejandra Sánchez Buendía

domingo, 7 de junio de 2009

La moda posmoderna


La moda posmoderna surge de una época de que parecía hundir todo lo chic en la crisis. La oleada de las marcas de smart casual dominó el mercado y la atención de los posibles consumidores se dirigió hacia lo que unía el diseño con la utilidad y costes reducidos. La moda parecía ponerse al servicio de la razón e inclinarse hacia el minimalismo.

La fecha del 11 de septiembre de 2001 y el ataque a torres gemelas marcó de modo simbólico el comienzo del declive de la economía occidental. También la moda sufrió un duro golpe. Sin embargo, encontró fuerzas para recuperarse y renacer, más fuerte, más importante, y más presente que nunca. El resurgimiento que no hubiera sido posible, sin la vinculación de moda a las estrategias de marketing.

Muchas de las marcas conocidas y acomodadas en el mercado optaron por romper con la larga tradición de su diseño para darse un look totalmente nuevo. Gucci con Tom Ford reemplazó las formas redondeadas y el colorido marrón por las líneas rectas y el clásico y brillante negro incrementando su aura de sexo y de glamour con la publicidad etiquetada como porno chic. Dior con John Galliano se envolvió en la extravagancia y decadencia. Prada optó por el compromiso político y la sensibilidad. Las tres marcas comprendieron que en la sociedad moderna el factor más importante para tener éxito no era el diseño de la ropa, sino el aura que la envolvía. Reinventándose, la alta costura volvió a ser deslumbrante, creativa, chorreanda de sexo, y uniéndose al mundo de los famosos conquistó a los medios de comunicación, y con ellos a las masas.


Sin embargo, los consumidores postmodernos resultan estar mucho más educados en el sector de moda que sus padres y no permiten que la alta costura haga de ellos sus víctimas. Demandan su derecho a elección, quieren crear su propio estilo y participar en la alza de las tendencias nuevas. De hecho, son ellos, las personas ´normales´, que hoy en día marcan lo que está de moda y lo que ya se debería echar del armario. Como consumidores inteligentes y con un presupuesto limitado buscan efectos originales combinando la ropa de alta costura con las prendas de marcas de gran distribución como Zara o H&M. Estas marcas que surgieron a lo largo del s. XX para su verdadero boom tuvieron que esperar hasta el nuevo milenio. Sus puntos fuertes son el diseño imaginativo y la incompatible relación de calidad-precio. Se las concibe como modernas y asequibles, revolucionarias en el sentido de que han democratizado la moda permitiendo a las clases medias el acceso a lo chic y glamour, incluso si las tendencias nunca han estado tan variables y pasajeras como hoy. Las marcas de gran distribución siguen las novedades de alta costura y las introducen en sus colecciones ofreciendo al consumidor gran variedad de modelos y asegurando su rápida rotación.

En la moda posmoderna aparece un fenómeno más, la semi-costura, que comprende la ropa de tipo sportswear o streetwear. La ropa que se lleva en unas circunstancias determinadas y que tiene una utilidad distinta de la estética, pero que a la vez no la renuncia. Se rige por tendencias paralelas a las de la alta costura, e incluso a veces llega a confluir con ella. Un ejemplo de ello es la marca Y-3, quimera que surgió de la cooperación de Adidas con Yohji Yamamoto, y que terminó adquiriendo identidad propia. La ropa deportiva ´salió´ del gimnasio y forma hoy parte de nuestra imagen. Son hoy muchos quienes consideran como una señal de estatus sus zapatillas de Nike, Adidas o Puma.

Nuestra imagen la constituye también nuestro cuerpo y, como dice Adolfo Vásquez Rocca en su tesis La Moda en la Postmodernidad, la moda hace exigencias al cuerpo y lo convierte en el espacio de representación. Hasta el punto en el que la moda se confunde con la identidad. La moda de hoy, aunque democratizada, no es uniforme y el mercado intenta tener en oferta prendas para todos, incluso para aquellos que quieren ir contracorriente. Las prendas funcionan como signos. Tal como funcionaban ya en el siglo XVIII siendo indicadores del estrato social, hoy indican la diferenciación o la pertinencia a un grupo o a una corriente ideológica.

Sin embargo, la moda posmoderna más que por la innovación se caracteriza por la repetición. Las combinaciones son nuevas y creativas, pero se basan en los elementos heredados, explotan lo ya descubierto. La posmodernidad juega con las modas pasadas mezclando estilos, cortes y colores, buscando los efectos nuevos chocantes o extravagantes, generando el exceso y la sobredosis. Es la moda que manifiesta la libertad, que comercializa el placer y no disimula su vinculación con el sexo. Libertad que junto con la tecnología nos permite hacernos diseñadores también a nosotros mismos. En el mercado podemos encontrar numerosos programas de diseño virtual, desde los más simples e intuitivos en el uso, como Virtualfashion y Textil Studio, hasta los destinados para los profesionales, como es el caso de CorelDRAW Graphics Suite. Y que permiten crear vídeos como éste.

La moda de hoy se ha convertido en un espectáculo, cuya parte imprescindible forma la publicidad y la fotografía de la moda. Un espectáculo para todos, ya no limitado para las clases más acomodadas, que irrumpe todos los ámbitos de la vida. Un espectáculo variable, extravagante y glamuroso. Un espectáculo, que salió de las pasarelas a la calle, y que llegó a formar parte de nuestra vida día a día.


Karolina Rosa

Bibliografía


Debido a nuestro interés primordial por el contenido del blog, hemos decidido situar la Bibliografía no como una entrada aparte, sino en el lateral derecho, en forma de listado. Es una de las opciones que ofrece blogger.com. a su vez, dentro de la categoria Bibliografía, hemos subdividido esta misma en diferentes apartados, apareciendo un listado de libros, tésis, artículos, conferencias y enlaces de páginas web.
Por ottro lado, hemos decidido cargar la practica 2 en la pagina megaupload.com, por lo que se podrá descargar directamente a partir de este link: http://www.megaupload.com/?d=7RJQEIMM
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